10 semillas feminizadas.
La Cashew Kush reúne dos variedades estadounidenses muy apreciadas, creando así una variedad fantástica. Al ser un cruce de Do-Si-Dos y Mendo Breath, a su vez cruzado con una Kush, ofrece a los cultivadores lo mejor de ambos mundos. Sus refrescantes aromas a limón y pino realzan otros terpenos menores que captan tu atención e imaginación. Con esta galardonada variedad pueden triunfar cultivadores personales de todas las habilidades. Finaliza con cogollos de color verde claro y follaje más oscuro, lo que la convierte en una planta muy fotogénica.
Muestra las dos caras de su ascendencia índica y sativa. Las aportaciones de las genéticas sativas son reconocibles en el estiramiento al principio de la floración, que da lugar a plantas más altas con mayor espacio internodal. Crece con una estructura abierta, lo que permite un mejor flujo de aire dentro y alrededor de la copa, sin necesidad de realizar una fuerte defoliación. La influencia índica en las genéticas proporciona una estructura robusta y resistente que soporta los brotes laterales cubiertos de cogollos.
Presenta una etapa de floración de 55 a 75 días, y la madurez se determina mejor inspeccionando el color de las cabezas de los tricomas y los pistilos. Debido a su etapa de floración de duración intermedia, la Cashew Kush va muy bien en jardines con múltiples variedades híbridas.
El crecimiento durante la etapa vegetativa es constante, pero no explosivo. La Cashew Kush mantiene un aspecto pequeño hasta que se inicia la etapa de floración. En esta etapa se produce una explosión del crecimiento, y la Cashew Kush alcanzará una altura media o alta. En interiores, puede llegar a unos 100 a 150 cm, y en exteriores se pueden ver plantas más altas, a partir de 150 cm.
Las semillas feminizadas de Cashew Kush son muy productivas en diferentes medios, como tierra, coco, hidroponía y suelos vivos. Los grandes rendimientos que ofrece esta variedad suelen oscilar entre los 400 y 450 gramos por m2 en interiores. En exterior, con plantas un poco más grandes, puedes anticipar hasta más de 500 gramos por planta si se cultiva en condiciones óptimas.
La producción de resina de la Cashew Kush es impresionante, y basta con tocar los cogollos para que se te peguen los dedos. Se recomienda utilizar guantes y un segundo juego de tijeras de podar limpias para la cosecha. Los cultivadores que tengan éxito serán recompensados con cogollos macizos, alargados y de color verde claro, que recuerdan a las variedades sativas más populares. El follaje termina adquiriendo un tono más oscuro, creando un elegante contraste fotogénico entre la hoja y el cogollo.
El cultivo en interior de esta variedad feminizada puede realizarse durante todo el año. Para jardines exteriores, la Cashew Kush prefiere un clima cálido y mediterráneo que le permita florecer bajo un sol radiante. Se trata de una planta agradable de manejar para cultivadores de todos los niveles, por lo que la Cashew Kush es apta para las técnicas de entrenamiento SCROG, SOG, Supercropping y Lollipopping.
Características:
- Variedad Feminizada
- Híbrido indica / sativa
- Periodo de floración medio
- Rendimiento elevado